Presentamos un plan monumental para transformar los icónicos jardines de la Torre Eiffel
En la actualidad, la Torre Eiffel es el símbolo más icónico de París, legado perdurable de una estructura que no fue diseñada para ser permanente. Cuando fue construida para la Exposición Universal de 1889, se programó que la Torre Eiffel sería desmantelada veinte años después. Afortunadamente, la Torre, que en aquel entonces era el monumento más alto del mundo, se salvó gracias a las transmisiones telegráficas que hicieron de ella un tótem de la tecnología.
Desde entonces, los alrededores de la Torre Eiffel han cambiado con las modas del paisajismo. En la actualidad el Campo de Marte y sus jardines, al igual que la Plaza de Trocadero, están atestados de turistas. Unos veinte millones de visitantes al año acuden en manada al pie de la torre. De ellos, al menos seis millones suben al primer piso de esta estructura de 324 metros de altura.
En preparación para los Juegos Olímpicos de verano que se llevarán a cabo en París en 2024 , 133 acres de parque se remodelarán, junto con la Torre Eiffel. Para elegir un diseño, la ciudad lanzó un concurso llamado Grand Site Tour Eiffel. Era importante que los concursantes fueran respetuosos con la historia y el entorno natural de esta estructura icónica, que los parisinos llaman “dama de hierro”. Muchas áreas volverán a sembrarse, a convertirse en parques o zonas peatonales.
Mantener este espacio icónico
Según las instrucciones del ayuntamiento de París, el nuevo diseño del parque debe “crear y presentar caminos urbanos y verdes, reequilibrando los espacios públicos y dando más prioridad a los peatones, para garantizar una gestión óptima del tránsito”.
Los arquitectos del paisaje se enfrentaban a la tarea de modernizar la zona, respetando a la vez el espíritu de este lugar tan querido. Además, en París las restricciones de planificación urbana son muy rigurosas. Esta es una de las áreas clasificadas como “sector protegido”, así que el menor cambio debe ser aprobado por las autoridades de la ciudad.
El premio del concurso Grand Site Tour Eiffel, en el que participaron 42 concursantes, fue otorgado al despacho de arquitectos londinense Gustafson Porter + Bowman (GP+B). Siguiendo parámetros sumamente estrictos, GP+B creó su proyecto OnE (One Line). Inicialmente los arquitectos tenían la idea de fortalecer el eje que parte del Trocadero hasta la Academia militar. “Para conseguirlo, decidieron recrear un área verde en la Plaza del Trocadero para acentuar el espacio ocupado por los escalones con gradas de la Fuente de Varsovia, diseñando una pendiente escalonada”, explica Mary Bowman, arquitecta paisajista y uno de los autores del proyecto.
El tablero del Puente de Jena se adornará con vegetación y volverá a ser peatonal. Bowman explica que su despacho también propone que se refuercen las superficies de los jardines del Campo de Marte, se elevarán unos 30 centímetros, para “mejorar la perspectiva del eje central”.
Fusionar los siglos XIX y XXI
Utilizando las tecnologías de escaneo-a-BIM, Autodesk y la empresa francesa Gexpertise crearon una maqueta para los participantes del concurso, al igual que para ilustrar el diseño final. El modelo se basó en unos 350 GB de datos de nube de puntos (datos topográficos) recopilados por los escaneos y la fotogrametría de la zona circundante a la Torre Eiffel, entre el emplazamiento del Trocadero, el Campo de Marte y las orillas del muelle Branly, así como entre el Puente de l’Alma y el Puente Bir-Hakeim.
Esta zona definida incluye edificios, calles, paseos peatonales, áreas verdes y el Sena. Basado en esto, se creó un modelo simplificado utilizando InfraWorks para que los concursantes desarrollaran sus proyectos para participar en el concurso Grand Site Tour Eiffel.
Al reinventar las zonas peatonales que habían sido devoradas por los coches y las superficies pavimentadas, GP+B espera crear una nueva experiencia para quienes visiten París. “Llevamos a cabo un estudio sociológico observando los flujos de tráfico, así como trabajo de investigación histórica”, expuso Gilles de Wever, arquitecto paisajista de GP+B.
Los pintorescos jardines junto al eje que cruza la Torre Eiffel se rediseñaran “con diseño inglés, muy floreados y en formas irregulares, pero siguiendo el espíritu muy linear francés”, explica Wever. La empresa también aportará un toque impresionista, añadiendo una mezcla de plantas que se utilizaban tradicionalmente en parques y jardines cuando se construyó la torre.
“Llamamos a estas plantas ‘plantas del recuerdo’”, expone Wever. “Caracterizan los paseos de la gente por los parques y jardines del siglo XIX”. La paleta incluye plantas con néctar y fruta, que “maximizan el atractivo general del lugar, con insectos polinizadores, pájaros y otra microfauna”, explica Wever.
Desde un punto de vista puramente medioambiental, GP+B planea añadir más áreas verdes y superficies permeables para ayudar el desagüe y a la biodiversidad. Conforme cambien las estaciones, el parque floral irá cambiado en este famoso paseo. Para conservar los jardines, que no dejarán de ser accesibles, habrá nuevas opciones para quienes quieran sentarse.
Esta remodelación del área alrededor de la Torre Eiffel se llevará a cabo entre 2021 y 2023, sin que cierren el monumento a los visitantes. Aunque esto obviamente ocurrirá cuando los parisinos y los viajeros internacionales puedan disfrutar una vez más de uno de los lugares más apreciados del mundo.