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Las plataformas digitales aúnan procesos, datos y personas

  • Las plataformas basadas en la nube con ecosistemas abiertos impulsan la innovación y la resolución colaborativa de problemas.
  • Con el objetivo de unificar la manera de trabajar y de conectar herramientas, datos y equipos, en 2025 el 95 %de la actividad laboral se llevará a cabo en plataformas.
  • Los sectores de la arquitectura, la ingeniería y la construcción (AEC, por sus siglas en inglés), de la fabricación y de la comunicación y el entretenimiento tienen mucho que ganar con la interconexión y automatización de procesos en todas las fases de producción.

Durante estos últimos años, todos estamos experimentando cierta disrupción. Y no solo por la pandemia. El cambio climático, la inflación o la escasez de suministros y de mano de obra están conmocionando al planeta entero.

Pero, aunque la palabra disrupción tenga matices negativos, también supone una oportunidad para hacer las cosas de otro modo. La disrupción nos obliga a repensar, reimaginar y reinventar las cosas. En este momento, la transformación digital se está acelerando mientras surgen tecnologías apasionantes, que nos invitan a nuevos modos de colaborar y nos adentran en una era de innovación.

La doctora Linda A. Hill, catedrática de la Harvard Business School, no puede estar más de acuerdo. Con una profusa investigación en temas de innovación, liderazgo y transformación digital, es muy consciente de qué necesitan en este aspecto las empresas tecnológicamente maduras: “La innovación no tiene que ver con un genio individual, sino con un genio colectivo ―explicó en una charla TedxCambridge―. Es un tipo de resolución colaborativa de problemas, por lo general entre personas con diferentes competencias y diferentes puntos de vista”.

Para abrirse paso en el mundo de hoy, las empresas pueden canalizar ese genio colectivo trasladándose a plataformas basadas en la nube. Lo ideal es que se trate de entornos colaborativos y abiertos que agrupen datos, procesos y personas. Son la cúspide de la transformación digital y vienen decididas a cambiar el mundo haciendo saltar por los aires el statu quo.

¿Plataformas basadas en la nube? ¿Por qué? ¿Y por qué ahora?

Durante demasiado tiempo, la colaboración se ha visto lastrada por herramientas independientes que custodiaban los datos en formatos de archivo privativos. Los programas no podían comunicarse entre sí, los flujos de trabajo no estaban conectados y el personal debía acceder a archivos descomunales para obtener la información que necesitaba. Todo esto ha quedado atrás.

En una plataforma, las personas, los procesos y los datos se vinculan en un ecosistema abierto. La información fluye en todas direcciones para que la trazabilidad sea máxima. Los flujos de trabajo en tiempo real están automatizados y son extensibles. Los datos son granulares, de modo que el personal puede acceder a la cantidad exacta de información que necesita justo cuando la necesita. Un entorno único y colaborativo aporta más valor a todas las partes interesadas y cimenta la resiliencia. Y no hay mejor ejemplo de resiliencia que la ciudad de Nueva Orleans.

La ingeniera Meagen Williams es responsable del programa de aguas pluviales de Nueva Orleans, un lugar que ha sufrido la disrupción como ningún otro. Esta ciudad costera es particularmente vulnerable a las tormentas cada vez más intensas que provoca el cambio climático.

Williams, que fue testigo directo de la devastación provocada por el huracán Katrina en esta ciudad histórica, está cambiando el modo de hacer las cosas y pone en práctica ideas innovadoras basadas en datos. Su equipo está reduciendo el riesgo de inundaciones mediante zanjas de biorretención, terrenos permeables y parques adaptados para el control de avenidas de agua. En sus proyectos deben ponerse de acuerdo intervinientes muy variados (responsables púbicos, ingenieros, equipos de construcción y la propia ciudadanía), y recurren a los registros de datos para que la ciudad se adapte al futuro con resiliencia.

Al incorporar soluciones integrales basadas en un conjunto común de datos, las plataformas son perfectas para este tipo de proyectos. Todos los involucrados mantienen una misma visión, colaboran más estrechamente y se proporcionan unos a otros la información que necesitan en el momento adecuado. Todo tiene lugar en la nube, lejos del alboroto y el caos de los problemas del día a día. Al ritmo al que van las cosas, en 2025 el 95 % de la actividad laboral se llevará a cabo en plataformas basadas en la nube.

Autodesk no se queda atrás y brinda apoyo a tres sectores clave (AEC, fabricación y comunicación y entretenimiento) para que sean más innovadores, productivos y rentables mediante el salto a nubes específicas para cada uno de ellos. Estas nubes sectoriales, junto con un conjunto compartido de servicios (denominados Autodesk Platform Services, antiguamente Forge), permiten que las soluciones estén más interconectadas y sean abiertas y ampliables.

Gestionar proyectos de arquitectura, ingeniería y construcción en la nube hace que los equipos y los datos estén mejor conectados, lo que permite una colaboración fluida y minimiza los errores.

Conectar personas y datos para que todo funcione como un reloj

La conectividad es hoy más importante que nunca. Con la pandemia, dos terciosde los trabajadores estadounidenses con opciones de teletrabajar lo hicieron. En la actualidad, este porcentaje se ha estabilizado y el 45 % de los empleados a los que se da la opción se acoge a esta modalidad al menos parcialmente (un 25 % a jornada completa). En España, el 9,5 % de los trabajos se ejecutan a distancia, al menos en parte, mientras que en Latinoamérica este porcentaje se mantuvo entre el 20 y el 30 % en los peores momentos de la pandemia. Esta evolución del trabajo exige un cambio de paradigma, y la nube se configura como el lugar perfecto para el trabajo colaborativo, tanto si los compañeros están en la oficina de al lado como si se conectan a miles de kilómetros de distancia.

En el centro de investigación polar del British Antarctic Survey (BAS), los científicos estudian el impacto del cambio climático en el mundo. Dadas las condiciones extremas del entorno, su trabajo precisa una infraestructura increíblemente robusta. El BAS ha invertido unos 340 millones de euros en construir un nuevo buque de investigación y modernizar su embarcadero e instalaciones. Los proyectos son muy complejos y exigen la máxima coordinación entre intervinientes de todo el planeta, dirigidos por la empresa de ingeniería BAM International desde los Países Bajos, la consultoría sueca de arquitectura y construcción Sweco, los ingenieros daneses Rambøll y el equipo desplazado a la Antártida.

Gran parte de los prefabricados se producen en el Reino Unido y los equipos deben tenerlo todo preparado para construirlo en el pequeño lapso del que disponen entre octubre y marzo. El cronograma es muy exigente y no deja margen para errores u omisiones, de modo que están gestionando este proyecto en la nube. Hasta el más mínimo dato está compartido y las distintas aplicaciones informáticas son compatibles para que todo fluya y se agilice la colaboración entre lugares tan remotos del planeta.

En un futuro no muy lejano, organizaciones como el BAS utilizarán Autodesk Forma, una nube específica para el sector de la AEC con la que podrán conectar todo el proceso, desde la fase de concepto hasta el fin de la construcción. Con el tiempo, Forma también permitirá la adaptación continuada de modelos BIM.

El trabajo en el sector de la comunicación y el entretenimiento, que implica a multitud de personas y cientos de terabytes de datos, requiere sistemas de gestión centralizada de recursos como Flow, de Autodesk, para garantizar el avance del proyecto.

En la nube se gestionan mejor los recursos

En un campo muy distinto, los mundos ficticios del sector del entretenimiento, las películas contienen más datos en una sola escena de lo que la mayoría de los espectadores podemos apreciar. Y una película está formada por miles de escenas. Si añadimos efectos especiales, el volumen de datos necesario para una sola película resulta apabullante.

Ser consciente del alcance de estas magnitudes equivale a comprender que existen 100 000 millones de estrellas en la Vía Láctea y que hay otras 200 000 galaxias en el universo. En algunos casos, una película puede ocupar un petabyte de almacenamiento, el equivalente a 1000 terabytes. Y se necesitan miles de personas trabajando detrás de las cámaras, en múltiples dispositivos y emplazamientos, para hacerla posible.

Las nubes específicas para sectores concretos, como Autodesk Flow para medios de comunicación y entretenimiento, nos proporcionarán sistemas de gestión centralizada de recursos donde la información del proyecto podrá almacenarse y compartirse a lo largo de todo su ciclo de vida para garantizar una colaboración fluida y el avance del proyecto.

La productora de Amazon, Amazon Studios, cuenta con un catálogo de varios cientos de películas y series originales, cuya mayor producción hasta la fecha es Los anillos del poder, una precuela de la franquicia de El señor de los anillos. El proyecto consta de 9000 escenas para una serie de ocho horas en la que participaron cinco empresas de efectos especiales.

Muy pronto, las empresas de comunicación y entretenimiento podrán utilizar Flow para gestionar todos estos elementos y facilitar la colaboración entre los equipos de producción. De este modo, se optimizará todo el flujo de trabajo para llevar a la pantalla sus historias más épicas.

Gracias al diseño y la fabricación digitales, vinculados mediante una plataforma basada en la nube, los colaboradores pueden participar en los proyectos desde cualquier lugar del mundo.

Un estallido de innovación

Las plataformas basadas en la nube están ideadas para permitir la interoperabilidad de datos y la colaboración en tiempo real. Pero además promueven la innovación. De hecho, McKinsey estima que su capacidad para impulsar la innovación generará el 75 % del valor de la nube. Con una manera común de entender y manejar los datos, las personas pueden proponer ideas y entablar conversaciones muy fructíferas. Los colaboradores pueden estar en cualquier lugar del mundo y cada uno de los intervinientes puede aportar su propia visión.

Desde su sede en Huntington Beach (California), en BBI Autosport tienen claro que la fabricación y la innovación van de la mano. La empresa diseña y elabora accesorios de alta gama para Porsche tanto para circuito como para carretera. Pero es mucho más que una fábrica. Todos en este pequeño y eficaz equipo de mecánicos son verdaderos entusiastas de los Porsche y se los conocen al dedillo. La innovación está en el ADN de este taller.

El equipo colabora con diseñadores y fabricantes de todo el mundo. Crean prototipos e iteraciones y utilizan una impresora 3D para producir piezas más ligeras en menos tiempo. Mediante diseño generativo ponen a prueba sus componentes para analizar cómo influyen en la velocidad y maniobrabilidad hasta dar con la solución idónea. Y gracias a la nube y a Fusion 360 (que formará parte de Autodesk Fusion, la nube específica para el sector de la fabricación) pueden crear esos increíbles y exclusivos vehículos.

Cuando las empresas optimizan su flujo de trabajo en un proceso basado en datos, ganan eficiencia, sostenibilidad y capacidad de innovación. Están mejor posicionadas para mejorar sus resultados empresariales y dar solución a los principales retos de nuestro mundo. De las oficinas a la zona de producción, del guion a la pantalla y desde los primeros bocetos hasta el edificio construido, las plataformas nos permiten hacer las cosas no solo mejor, sino también de formas revolucionarias.

Acerca de

Andrew Anagnost es el presidente y director ejecutivo de Autodesk. La carrera profesional del Dr. Anagnost se extiende a lo largo de más de 25 años de experiencia en marketing, empresa y desarrollo de producto, con especial dedicación a la planificación estratégica, la transformación y el desarrollo de producto en diversas empresas, como Autodesk, Lockheed Aeronautical Systems Company y EXA Corporation. Además, se doctoró en la Universidad de Stanford y trabajó en el centro de investigación de NASA Ames en calidad de investigador posdoctoral en el Consejo Nacional de Investigación. Anagnost inició su andadura en Autodesk en 1997 y se ha responsabilizado de un amplio abanico de funciones en las áreas de marketing, nuevos desarrollos empresariales, gestión de producto y desarrollo de producto. Antes de convertirse en presidente y director ejecutivo en junio de 2017, ocupó el cargo de director de Marketing y de vicepresidente sénior de Estrategia de la Empresa y Marketing. En este puesto, Andrew se encargó de concebir y liderar la transición del modelo de negocio de Autodesk, con lo que la empresa pasó a ser un proveedor de servicios de SaaS (software como servicio). Anteriormente, Anagnost había asumido puestos directivos en muy diversos departamentos de Autodesk. Ya en sus primeros años en la empresa, coordinó el desarrollo de los productos de fabricación, e incrementó los ingresos de Autodesk Inventor en más de 500 millones de dólares. Anagnost es miembro del Consejo de Administración de Autodesk. Tiene una licenciatura en Ingeniería Mecánica de la California State University, Northridge (CSUN), además de un máster en Ciencias de la Ingeniería y el doctorado en Ingeniería Aeronáutica y Ciencias Informáticas de Stanford.

Profile Photo of Andrew Anagnost, Autodesk CEO - ES