¿Qué es BIM (Building Information Modeling)?
Muchas de las construcciones más mediáticas de todo el mundo, desde puentes hasta rascacielos, se han diseñado con BIM, un sistema de modelado en 3D que está transformando la arquitectura, la ingeniería y el sector de la construcción.
[Transcripción del vídeo]
Con la evolución del modelado paramétrico y la captura de realidad, los datos estructurales son cada más completos y complejos, lo que permite ahorrar tiempo y dinero en los preparativos del proyecto, al tiempo que se evitan los errores y las costosas solicitudes de cambios.
Sin importar los conocimientos que tengas sobre BIM, debes saber que la historia documentada al respecto es más extensa de lo que se puedes pensar. En este vídeo de Redshift, descubrirás la impresionante trayectoria de BIM, que se inicia en la década de 1960 cuando surgió la demanda de modelos de construcción digitales, pasa por los mandatos legales sobre el uso de BIM y llega hasta la integración BIM-SIG en la actualidad. ¡No hay duda de que BIM ha avanzado mucho!
¿Cuál es la tecnología que impulsa muchas de las estructuras arquitectónicas que se construyen en la actualidad?
Se trata de un proceso denominado Building Information Modeling.
BIM es un proceso de modelado 3D que revoluciona la forma en que la gente planifica, diseña, construye y controla los edificios e infraestructuras en todo el mundo.
Ya en la década de 1960, los pioneros informáticos plantearon la necesidad de modelos de construcción digital flexibles.
La revolución llegó en 1963 cuando Ivan Sutherland desarrolló Sketchpad.
Esta rudimentaria aplicación permitió a los usuarios definir la geometría, y manipular objetos en el espacio solo con la ayuda de un lápiz electrónico en una pantalla de ordenador.
No obstante, los modelos construidos por estos predecesores carecían de datos sobre características de rendimiento funcional y, sin la información sobre el funcionamiento de los edificios, resultaban unas implementaciones bastante superficiales.
En 1984, estos precursores de BIM pudieron empezar a utilizarse en ordenadores personales.
Aunque fue en 1986, cuando Robert Aish acuñó el término “modelado de construcción”, cuando estos programas se usaron por primera vez en proyectos grandes y complejos, como la renovación de una terminal del aeropuerto de Heathrow.
En 1993, el desarrollo de Building Design Advisor por parte del Laboratorio Nacional Lawrence Berkeley abrió el camino para la creación de sistemas con datos de rendimiento sobre el funcionamiento de los edificios y sus componentes.
A finales de la década de 1990 y principios de la de 2000, empezó a materializarse el diseño actual de BIM.
Los objetos y las formas presentaban metadatos completamente incrustados y se podía conocer la relación entre ellos y con el edificio en general.
2004 fue un gran año para BIM.
Por primera vez, diseñadores, constructores y propietarios podían trabajar de forma colaborativa en un único modelo centralizado actualizado dinámicamente.
Así, si un diseñador aplicaba un cambio en el modelo, la lista de la compra para la construcción de los proyectos se actualizaba automáticamente, cambiando por ejemplo el número y el tamaño de las ventanas.
En 2008, cuatro años más tarde, el modelado paramétrico también registró un avance con una avalancha de diseños de salida, lo que aumentaba el control de los usuarios sobre las decisiones del proyecto.
Mientras que la digitalización láser y la captura de la realidad plagaban los modelos BIM con gran cantidad de datos precisos, el ahorro de tiempo en los preparativos del proyecto y la detección de conflictos permitieron la localización automática sobre el terreno de problemas en tareas como la disposición de conductos o vigas, y evitar costosas solicitudes de cambios con la ayuda de la detección de conflictos.
Los ingenieros de la China Zun Tower en Pekín identificaron miles de problemas en el modelo BIM.
De ese modo, lograron reducir las solicitudes de cambios pasivos en un 80% en comparación con otros proyectos similares.
Las indiscutibles mejoras en cuestión de tiempo, materiales y costes de BIM llevaron a que, en 2016, Reino Unido ordenara que todos los proyectos de construcción con financiación pública utilizaran BIM, una decisión secundada pronto por otros países.
Alemania exigió que, para 2020, se utilice BIM en todos los proyectos de transporte.
Con BIM disponible actualmente en la nube, los equipos pueden colaborar en el mismo modelo desde cualquier parte del mundo, lo que aumenta enormemente su eficacia.
En un futuro próximo, BIM y SIG se fusionarán en el modelo, lo que ayudará a los diseñadores a tomar decisiones críticas en función de la ubicación geográfica exacta.
Conforme la tecnología de modelado 3D registra más avances y resulta más accesible desde un punto de vista comercial, el proceso BIM se integra cada vez más en la construcción del mundo y promete una experiencia más completa y más colaborativa para los usuarios que diseñan y construyen los espacios donde vivimos y trabajamos.